martes, 21 de junio de 2016

NUEVA AVENTURA PARA EL VERANO. CRUZAR ESPAÑA DE ESTE A OESTE

Día 21 de junio y con la llegada del verano nos aparecen los nuevos propósitos marcados a principio de año para realizar en los meses venideros. Entre ellos un nuevo reto, un nuevo camino de los "Bicigrinos Extremeños" algo diferente a los realizados en años anteriores y que tendrá lugar si todo va según lo esperado en el próximo mes de agosto.

Por cuarto año consecutivo volvemos a rellenar las alforjas con nuestro pequeño equipaje y esta vez para cruzarnos nuestro país de Este a Oeste, más concretamente de Valencia hasta Mérida, utilizando como vía de enlace, primeramente el Camino del Levante hasta Toledo, para posteriormente finalizar transitando por el Camino Real de Guadalupe hasta la capital extremeña.

Dos camino históricos:

El primero; era la ruta seguida por los peregrinos jacobeos que iniciaban su camino en Valencia, recorriendo hasta cinco comunidades para llegar a Santiago de Compostela como son la Valenciana, Castilla La Mancha, Madrid, Castilla-León y Galicia.

Fuente: http://www.berenguela.com/se-estrena-albergue-de-peregrinos-en-el-camino-del-levante/2013-12-09

El segundo; el Camino Real de Guadalupe, ruta de peregrinaje que estuvo muy activa entre los siglos XIV y XVIII siendo el que utilizaron distintos reyes de Castilla en sus peregrinaciones a Guadalupe.

Fuente: https://ruralitaenvilluercas.files.wordpress.com/2009/01/mapa.jpg

En total cerca de 850 kilómetros de travesía para disfrutar de una increíble diversidad en todos los sentidos: cultura, pueblos, orografía, paisaje, gastronomía, historia literaria… en la que sólo nos queda ir echando días hacia atrás e iniciar nuestro pedaleo el próximo 31 de julio, con el objetivo de recorrer nuestro camino en unas 10 etapas si todo va según lo planificado.

Como decimos, el 2016 será diferente y después de lograr llegar tres veces consecutivas a la Plaza del Obradoiro en Santiago de Compostela hemos querido marcarnos un paréntesis a la casi obligada visita al apóstol Santiago. No por ello dejaremos de pensar en volver tan pronto como podamos, pues como suele decirse, Galicia engancha y sus caminos de peregrinaje te atrapan año tras año. ¡¡Volveremos!!

Y como siempre, no queremos hacer nuestro camino en vano y, para ello, nuevamente este año iremos también con el objetivo  de dar a conocer la vida de un super campeón, la historia del pequeño Yeray Bayón Risco, un #heroessincapa que demuestra día a día su fuerza y su afán de superación, tanto él, como toda su familia. Es por ello que nuestro granito de arena lo queremos hacer en nuestra medida de lo posible, portando una equipación con el logotipo de su Asociación: "CAMINANDO CON YERAY" y a su vez animar a todas aquellas personas con las que tendremos oportunidad de cruzarnos y conocer en nuestro camino de que puedan colaborar con nuestro pequeño guerrero.

Con Yeray y su padre Iván

Desde aquí os animamos a tod@s a que colaboréis de alguna manera con esta buena causa y os enlazamos a su página web para que conozcáis mucho mejor a Yeray y su historia: http://www.caminandoconyeray.com/  

La cuenta atrás ha comenzado....Valencia nos espera.

viernes, 13 de noviembre de 2015

CAMINO PORTUGUÉS / DÉCIMA ETAPA: CESANTES - SANTIAGO DE COMPOSTELA

TRACK DE LA DÉCIMA ETAPA: CESANTES - SANTIAGO DE COMPOSTELA

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Hoy afrontamos la última etapa de nuestro particular Camino de Santiago donde hemos rodado en su mayoría por tierras portuguesas. Nuevamente es una contradicción de sensaciones las que nos rondan por nuestras cabezas al levantarnos y tener que afrontar los 85 kms., que nos restan para llegar a la Plaza del Obradoiro; por un lado las ganas de llegar (sanos y salvos) pero por otro lado, como ya viene siendo habitual en anteriores itinerarios ya realizados, nos aparece la melancolía del peregrino por no querer acabar su aventura. De todas formas, nosotros veníamos con las ideas claras de concluir nuestra ruta en 10 etapas y al final parece ser que la planificación que realizásemos previamente ha ido sobre ruedas y serán por tanto 10 días los que hemos estado transitando por caminos, carreteras, pistas, veredas...con nuestras bicicletas.


Hoy despertamos pronto. Hemos descansado bastante bien en el Albergue "O Refuxio de la Jerenaza de la localidad de Cesante y lo primero que hacemos es pegarnos un buen desayuno junto con el resto de peregrinos que inician también su jornada, todos a pie, siendo por tanto para ellos varias jornadas las que les queden para llegar a Compostela. Únicamente el amigo Txabier, de quién ya os hablé en anteriores entradas, realiza también el camino a bicicleta, pero hoy él tirará íntegramente por carretera ya que los radios de una rueda parece que no le auguran un buen transitar por los sendas y caminos. Aún así, nos despedimos de él realizándonos la foto de rigor en el albergue y citándonos a nuestra llegada y, por qué no decirlo, para celebrar la conquista de otro Camino con algunas copitas de por medio.

Con Txabier en el Albergue O Refuxio De la Jerezana

Primeras pedaladas de la jornada

Pero antes de todo esto, toca pedalear. Tanto Javi como yo (Jairo) iniciamos nuestra marcha por la carretera N-550 en busca de Pontevedra (km. 20) entre subes y bajas y con unas bonitas vistas a nuestra izquierda de la Ensenada de San Simón. En los primeros kilómetros vamos circulando con mucha precaución debido a la presencia de vehículos a motor, aunque pronto cogeremos los desvíos que nos marcan las flechas amarillas para rodar por zonas boscosas de umbrías con algún que otro tramo bastante técnica debido a la presencia de zonas adoquinadas con grandes piedras que nos hacen romper a sudar y nos indica que a pesar de ser la última jornada, no por ello será una etapa plácida. 

Ensenada de San Simón


Rodando junto con los peregrinos

Aún así llevamos un buen ritmo y pronto nos aparecen señales de que estamos llegando a Pontevedra. Ya en esta ciudad, vemos atisbos de que su población va despertando debido a la actividad de los comerciantes de la zona a pesar de ser hoy domingo e igualmente notamos que para muchos jóvenes la noche se hizo larga. Cruzamos dicha localidad sin apenas tráfico por la zona del Estadio Municipal de Pasarón para adentrarnos en diferentes "Ruas" que nos irán acercando a Caldas de Reis, punto de parada donde realizaremos nuestro desayuno, poniendo el primer sello de la jornada en nuestras credenciales en la Parroquia de San Tomé.


Pontevedra

Justamente en este lugar volvemos a ver al grupo de "bicigrinos" gallegos que salieron de Oporto y con los que nos cruzamos en varios ocasiones en el día de ayer. Para algunos de ellos se le está haciendo bastante dura su ruta jacobea debido a problemas físicos y mecánicos, aún así los acompañamos durante varios kilómetros una vez terminamos de desayunar ya que a partir de ahora ellos conocen bien la zona y nos viene bien ir en "grupeta" para que se nos vaya haciendo más ameno nuestro trayecto. 

Desayunando en Caldas de Reis

Parroquía de San Tomé

Aún así, finalmente no nos queda más remedio que dejarlos atrás ya que vemos aminorada nuestra marcha cuando estamos muy cerca de la localidad de O Padrón, en la que cruzamos sus calles con algo de dificultad debido a que nos encontramos con su mercadillo "dominguero" repleto de personas y que nos obliga a transitar por el momento más lento que sí fuésemos andando.

 "A leuro a leuro..."

Mercadillo...baratillo...en O Padrón

A partir de este momento, iremos pasando por muchas localidades pequeñas cercanas ya a la ciudad de Santiago de Compostela. Iremos alternando pistas y camino para ir salvando la nacional 550, durante los algo menos de 30 kilómetros que nos quedan para poner punto y final a nuestra tercera travesía jacobea. Este tramo se caracteriza por ir cogiendo altura, pues escojas la entrada que sea, para llegar a la capital gallega siempre tendrás que realizar el último esfuerzo por si no hubiera sido suficiente lo que ya llevamos metido para el cuerpo. Pero al fin y al cabo, estos últimos kilómetros se hacen con otra mentalidad, con la idea fija de poder llegar y ver de nuevo la Plaza del Obradoiro.


 La cosa va terminando



 Aun quedaban algunos adoquines 


A pesar de todo, para nosotros hoy el final se nos está haciendo bastante duro y la mediodía se nos echa encima por lo que tanto Javi como yo decidimos parar en un restaurante situado a pie de carretera próximo a Rúa de Francos y meternos unos buenos platos de pollo con patata acompañados de unos calamares y por supuesto de unas fresquitas cervezas.

Reponiendo calorías

Una vez terminamos y reposamos la comida, la cual nos ha dado la suficiente fuerza para seguir nuestro camino, poco a poco nos vamos aproximando a la entrada de Compostela, viendo cada vez más la presencia de peregrinos que están terminando también su aventura. No obstante, nosotros con la idea de no perdernos tiramos de GPS para poder orientarnos hacia la Plaza, con tan mala suerte que el track que teníamos metido no hacía otra cosa que alejarnos de nuestro destino y ver las famosas torres de la Catedral cada vez más pequeñas.

Siga la flecha amarilla

¿Dónde está la Catedral?...todos los años igual jaja

Decidimos parar e ir transitando por las calles de la ciudad bajo nuestra intuición, con algo de sentido común y de orientación la cual en ocasiones funciona mejor que la tecnología gps más avanzada del momento. Así, deshaciendo los kilómetros de más que hemos querido añadir a nuestra última etapa, llegamos por fin al centro neurálgico de toda peregrinación, ahora sí estamos en Santiago de Compostela, compartiendo y escuchando la algarabía de emoción que como es habitual te encuentras en la Plaza del Obradoiro.  

 Aquí está...Plaza del Obradoiro

Las "Mérida" aguantan como jabatos

FIN a nuestro tercer Camino de Santiago, también denominado Camino Portugués, por haber transitado en su mayoría por tierras del país vecino. Y FIN a otra nueva experiencia que no hace más que hacernos pensar en un Camino futuro que poco a poco habrá que ir asentando las bases de lo que podrá ser...pero de momento, hoy tocaba disfrutar, compartir emociones y sensaciones, ir desgranando nuestras anécdotas y sobretodo ir recuperándose físicamente con unos buenos manjares gallegos...en definitiva disfrutar de esta tierra que año tras año nos pide que volvamos.

Así esperamos que sea para tod@s el próximo año.


Resumen de la décima etapa

Después de 10 días a tope...estos fotones merecen la pena

Jairo y Javi (¿¿Esteban y Aurelio...para el cuarto no??)

PD: Como ya os adelanté en esta entrada, volvimos a coincidir con el amigo Txabier. Ahora era el momento de contarnos desde cada punto de vista lo que había significado para todos nosotros este Camino por tierras portuguesas...pero eso sí, que mejor forma que hacerlo comiendo, bebiendo, bailando y ,en definitiva, dejando a un lado esos gerundios que no casan muy bien con la actividad deportiva que durante los 10 días atrás habíamos estado practicando.

 Marisco del bueno 

 Albariño yo te quiero

Más vale una imagen o varias que cientos de palabras

Fin de fiesta ¡¡Chin pum!!

¡¡BUEN CAMINO A TOD@S!!

martes, 29 de septiembre de 2015

CAMINO PORTUGUÉS / NOVENA ETAPA: PONTE DE LIMA - CESANTES

TRACK DE LA NOVENA ETAPA: PONTE DE LIMA - CESANTES

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Suena el despertador a las 7.30 de la mañana en el hostal "O Marquês" donde nos hemos alojado en la localidad de Ponte de Lima. Antes de partir nos disponemos a tomar el desayuno el cual nos entraba en el precio de la reserva, unas buenas tostadas y algo de fruta para ir cargando las pilas. Posteriormente rellenemos nuestros bidones de agua y montamos las alforjas en nuestras bicicletas para comenzar una nueva jornada, concretamente la novena etapa del Camino Portugués, la cual tocará por fin tierras gallegas y bajaremos la barrera psicológica de los 100 kms., para llegar a nuestra meta que no es otra que Santiago de Compostela.

Hostal "O Marques"

Primeras pedaladas del día

Una vez comenzamos a dar las primeras pedaladas pronto vemos las flechas amarillas que nos indican el camino correcto a seguir. Hoy tendremos por delante cerca de 80 kilómetros con un desnivel acumulado de 1.224 metros de subida, prácticamente concentrándose lo más duro en el primer tercio de la etapa.



Zonas llanas y de buen rodar

Aún así, el inicio (unos 8 kms.) es una zona bastante llana y sombría, permitiéndonos rodar a un buen ritmo antes de comenzar lo que sería a la postre para nosotros la parte técnica de la jornada, (km. 12-20) viéndonos obligados en varias ocasiones a bajarnos de las bicicletas para poder salvar unas cuantas rampas de grandes pendientes empedradas, tramo que desaconsejaría totalmente a todos aquellos que vamos a dos ruedas.


La cosa se va complicando

Es justamente ahí, donde sufro una caída al paso por una rápida curva con algo de tierra suelta y mi rueda delantera deja de tener contacto con la superficie anunciándome un desenlace final esperado y no deseado: "tortazo sobre la tierra" y magulladuras y rozaduras en rodilla, muslo y brazo izquierdo.


...y más que se complica

Ostiazo...pero no queda más remedio que levantarse y seguir 


Un imprevisto que nos obliga, tanto a Javi como a mí (Jairo) a detenernos y observar si la caída no ha pasado a mayores en lo mecánico de mi bicicleta y sobretodo y lo más importante en mi condición física. Después de comprobar que todo está "OK", con algo de dolor, comenzamos a rodar, dándome cuenta una vez que llevamos algo más de 500 metros recorridos de que me falta la cámara de fotos compacta la cual habría salido despedida del bolso delantero que siempre llevo en el manillar. Por tanto nuevo imprevisto y nueva parada para que Javi retrocediese al lugar del accidente para ver si encontraba la dichosa "camarita" que parece estar predestinada a estropearse y perderse en todos los caminos que llevo realizado.

Sabíamos que la cámara debía de estar allí ya que sólo había pasado un grupo de peregrinos a pie procedentes de Gibraltar y los cuales también nos habían ofrecido su ayuda en el momento de la caída por lo que mientras me voy curando de mis heridas pronto llega Javi con ella en la mano, viéndome aliviado más por no perder todas las fotos que ya llevaba realizada hasta el día de hoy que por la propia cámara en sí y cuyas marcas y roces dan fe de que esto de los itinerarios jacobeos no suelen ser unos "caminos de rosas" según porqué zonas vayas transitando.

En nuestro caso, y más en esta novena etapa, la dureza se hacía patente en los tramos empedrados donde teníamos que echarnos la bicicleta a cuesta para poder seguir avanzando. Tanto es así, que al ver que esos tramos van siendo muy sucesivos decidimos tirar de "GPS" y buscar una alternativa que fuese algo más favorable en nuestro rodar. Finalmente encontramos una senda bastante ancha dedicada al tránsito de vehículos que realizan labores de extracción de resina en estos inmensos bosques de pinos permitiéndonos retomar nuestra marcha por carreteras y pistas asfaltadas, no antes sin toparnos con una pequeña casa de campo en la que nos reciben, no con una actitud muy amigable, dos alterados "perritos" guardianes que nos hacen pegar un buen respingo y ponernos el corazón a mil.


¿Ciclismo o escalada?

Merece la pena las vistas...

Parece ser que hoy todos estos pasos inesperados querían tener más protagonismo de la cuenta para que quedasen como anécdotas del camino y poder plasmarlas en el relato final de nuestra experiencia. Además, hoy teníamos que añadir el tema del incendio (con total seguridad creemos que intencionado) que se estaba produciendo en el monte, cerca de la zona por donde estábamos pasando.


Incendio cerca de Valença do Minho

Detalle en el Restaurante "Bom Retiro" 

Después de todo lo contado, y algo excitados por tanto sobresalto, decidimos que es el momento de realizar una parada técnica para tomarnos un refresco y algo de fruta en el "Restaurante Bom Retiro" (km. 25) a nuestro paso por el municipio de Rubiaes, lindando con la carretera N-201 por la cual iremos transitando a continuación y con la que alternaremos en varios momentos con pistas que pasan por pequeños pueblos antes de llegar a Valença do Minho, ciudad que se encuentra situada en el Distrito de Viana do Castelo, región Norte y subregión del Minho-Lima, con aproximadamente 8.000 habitantes en su núcleo principal, estando dedicada en la actualidad al turismo siendo uno de los mayores centros comerciales abiertos de Europa, condición que pronto notamos al cruzarnos con abundantes turistas en dicha ciudad que a su vez es la última localidad portuguesa de nuestro itinerario para después de cruzar el Río Minho/Miño por el Puente Internacional entrar a España por Tui.

A 125 kms., de Santiago ¡¡Vamooooss!!

Fortaleza de Valença do Minho

Sus calles


Adiós Portugal...fue un placer

Tras el puente entramos en España (por Tui)

De Tui podemos destacar que es la entrada de acceso a Galicia desde Portugal por lo que históricamente ha sido un núcleo importante de paso, incluso antes del propio peregrinaje jacobeo. El trazado utilizado ya procede de la época romana. Se trata de la vía XIX del itinerario de Antonino, que comunicaba con Braga y Lugo.


Catedral de Tui

Callejeando por Tui

Es allí donde realizamos una pausa para fotografiarnos en la Plaza de San Fernando junto a la fachada de la Catedral, instante en el que se nos acerca un hombre para preguntarnos desde dónde veníamos haciendo el Camino, y el cual según las indicaciones que nos dio, resultó ser miembro de la Asociación Amigos del Camino de Tui y uno de los encargados de pintar las flechas amarillas por esta zona. Tanto es así que, a la hora de iniciar nuestra marcha, nos incidió en que cogiésemos en una bifurcación del camino el ramal correcto, pues existe otro que te lleva a una zona industrial y donde varios restaurantes de la zona están intentando mandar por ahí a los peregrinos con el fin de que lleguen a sus negocios, siendo esta zona poco o nada atractiva. 


Monolitos del Camino

¿La solución? tirar por la variante que nos dijeron y cuyo camino no tiene perdida ya que han puesto como referencia una pintura de la Catedral de Santiago. Esta senda desciende ligeramente entre tupida vegetación hasta el vado de A Ponte Baranco, sobre el Louro, y cruza posteriormente un paso de invierno. Desde este punto, un camino de tierra entre viñedos y arbolado alcanza una pista asfaltada, que se interna por la parroquia de San Xurxo de Mosende, visitando los lugares de Monte, Vides y Cruceiro.

Pasos de invierno

Calzadas empedradas

Lienzo de Santiago que encontramos a nuestro paso

Otro posterior paso de invierno, conocido por los vecinos como 'paso de Botate', desemboca en un camino terroso. Después, una pista local accede a la parroquia de Santiago de Pontellas junto a las casas de Centeáns. Aquí, una 'cruz de mortos' da paso a un magnífico crucero, situado sobre el antiguo Camino Real a Vigo. En esta variante aguardan aún más sorpresas, como la capilla de San Carpio y su crucero, así como también la Quinta do Adro o da Inquisición, donde el trazado se separa del Camino Real. Una carretera local con carril peatonal y para ciclistas conduce desde este punto al sendero que sigue la estela del río Louro para llegar al municipio de O Porriño. Es allí donde nos encontramos con un grupo de cuatro amigos bicigrinos gallegos que salieron desde Oporto y con los que compartiremos carretera en varios momentos de la jornada.

Cruceros

Ya para ir terminando, el último tramo iremos circulando por la carretera N-550 y en su mayoría por el Camino das Lagos (Pista) que nos hacen ir mucho más relajado al no existir apenas tráfico rodado. Será en esta zona donde tendremos que salvar unas duras rampas a la altura del Aeropuerto de Vigo pero que una vez superado nos dejará a los pies de la ciudad de Redondela. Pero antes de llegar, decidimos que es el momento de parar a comer en un bar de carretera ya que el esfuerzo de la etapa va haciendo mella en nuestro estado físico. 


Galicia nos da la bienvenida

Al reiniciar nuestro pedaleo, una vez que cruzamos Redondela, nuevamente cogemos la N-550 para llegar a Cesantes, hoy punto y final de nuestra novena etapa y en la que dormiremos en el Albergue "O Refuxio de la Jerezana".

Ya en el albergue
Por fin...en "O Refuxio de la Jerezana"

En total, 79 kilómetros que nos dejan para el último día de nuestro Camino a tan sólo unos 85 de llegar a Santiago de Compostela. Después de todo lo acontecido hoy, la llegada al albergue, una vez que nos arreglamos y comemos unos bocatas en un bar próximo a él, supone un día de recuperación para afrontar la recta final de nuestra tercera experiencia con el Camino. 


Resumen de la novena etapa